POR José Inés Figueroa Vitela
Hasta el fin de semana, solo eran el aun delegado de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano CHECO GUAJARDO MALDONADO y el ex alcalde reynosense OSCAR LUEBBERT GUTIÉRREZ quienes habían estado llamando a Consejeros priístas para pedirles el apoyo a sus respectivas aspiraciones por ocupar la Presidencia del Comité Directivo Estatal del partido.
Antes ya había visitado a unos y llamado a otros, también el ex subdelegado del INFONAVIT en Matamoros y ex líder juvenil local, LUIS ENRIQUE ARRIOLA, quien les pidió el apoyo, para celebrar la reunión del Consejo Político estatal, a unos, y a otros también el voto para su candidatura.
Parece que piensan que sí va a ser el voto directo, universal y secreto de los consejeros, el que definirá quién cubrirá el cargo dejado acéfalo por RAFAEL GONZÁLEZ BENAVIDES y que ha ocupado de manera interina AÍDA ZULEMA FLORES PEÑA, por casi un año, al momento del inminente cambio.
Amigos al fin, de unos y otros, los consejeros no le han dicho “no” a quien les ha llamado, pero los más, todavía están a la espera de que haya una luz que ilumine, en la más pulcra de las tradiciones, al ungido, para no tener la vergüenza de los eventuales resultados negativos, o prolongar la oportunidad de seguir criticando y condenado todo.
La inminente llegada del Delegado del Comité Ejecutivo Nacional, en principio, pondrá los puntos sobre las íes respecto del perfil del proceso.
Independientemente de que se abra la elección o se traiga línea sobre un personaje previamente seleccionado, en cualquier escenario la intención será hacia buscar el consenso para llegar con candidato único al Consejo eleccionario, para evitar desgastantes fricciones.
“Construir una estrategia electoral sustentada en la unidad y la coordinación, para consolidar un escenario de éxito y victoria para el PRI en el Estado y de cara a las elecciones federales del 2018” fue la indicación que para Guanajuato hizo el viernes ENRIQUE OCHOA REZA.
Fue ocasión de la designación que el presidente del Comité Ejecutivo Nacional del Partido Revolucionario Institucional hizo entonces de la Senadora GRACIELA ORTIZ GONZÁLEZ como delegada en esa entidad.
Dos días antes, comisionó al ex diputado federal y ex funcionario veracruzano FERNANDO CHARLESTON HERNÁNDEZ, como Presidente provisional del Comité Directivo Estatal en Morelos, donde hacía las veces precisamente de Delegado nacional.
Allá no operó la prelación tras las renuncias del Presidente y la Secretaria General.
Para Tamaulipas los rumores y presuntas filtraciones dicen que esta semana se nombrará al Delegado, mencionándose con insistencia el nombre del ex diputado federal poblano por partida triple VICTOR EMANUEL DÍAZ PALACIOS.
Es el mismo que ya estuvo aquí, a donde llegó en plenas campañas del 2 mil 15, en aquella elección federal cuando el PRI volvió a conocer el “carro completo”, agenciándose las 8 diputaciones federales de mayoría, un triunfo tan grande como la debacle del año siguiente.
Entre tantos aspirantes declarados de origen, se acerca la hora de la verdad, de medirse en la contienda, para lo que deberán pensar muy bien sus dichos, pues solo en la conciliación de todas las expresiones de participación política podrá dibujarse el triunfo electoral.
El decantamiento de intenciones en pos de la dirigencia se da por naturaleza, dejando fuera a aquellos quienes pensaron llegar al cargo, con la vista puesta en el manejo de las prerrogativas o en la primera candidatura al Senado, dando por sentada la derrota.
En ese sentido CHECHO GUAJARDO es el único que ha declarado “recio y quedito” que su plan se limita al oficio partidistas, sin más meta que lograr el mejor saldo electoral posible, alejado de la tentación de las candidaturas del 2 mil 18; “ni una regiduría”, ha dicho.
Igual se ha cuidado de no denostar a los demás aspirantes o al mando constituido, dedicado a ponerse en contacto con los potenciales electores, pidiéndoles su apoyo, en los ratos libres y fines de semana que le permite el cargo federal que ahora detenta.
Su aspiración ahora es que “no se tire línea” y que se dé un proceso interno libre, democrático, donde se haga valer el voto de los Consejeros, sin detrimento de los consensos que se puedan concretar entre todas las expresiones de participación política del partido.
Dicen que OSCAR LUEBBERT GUTIERREZ anda en gira por el Estado desde la semana pasada, haciendo proselitismo, pero sus encuentros han sido más bien discretos, alejados de la opinión pública.
Los mensajes cruzados han sido más bien cifrados, soterrados, ocultos, entre distintos personajes que en principio, dejan ver que el PRI, tras la mala jornada electoral del año pasado es un partido muy vivo, donde convergen muchos intereses, incluidos los de los adversarios que siguen viéndole como un enemigo de peligro.
Antes de poder mermar al partido antagónico, el PAN gobierno necesita reconciliar las estructuras propias, donde andan dándose hasta con la cubeta disputando un capital tan efímero, que han dilapidado en muy corto tiempo.
De los alcaldes panistas de la presenta camada, el maderense ANDRÉS ZORRILLA sigue presumiendo ser el discípulo más avanzado, causando cualquier cantidad de excesos por los que su fama a trascendido las fronteras de su municipio… y lo presume.
Su “generosidad” para comprar a dos-tres adeptos con recursos de procedencia dudosa, ha chocado con el descobije que ha dado al pueblo en su conjunto, al someterlo a una crisis de inseguridad y debacle en la prestación de los servicios públicos.
El protagonismo del que pretende hacer alarde se queda en quien le alza en hombros, pues sus limitaciones resultan inocultables, al grado de convertirse en la comidillas de los congéneres con quienes tiene roce, fuera del séquito de aplaudidores.
Por los rumbos del magisterio, su dirigente estatal, RIGOBERTO GUEVARA VÁZQUEZ, reiteró el compromiso de proteger garantías y prestaciones laborales, al tenor de una reunión en que entregó reconocimientos a destacados profesores jubilados.
Hasta ahora no se ha dimensionado de manera suficiente el riesgo en que se encuentran los fondos para el retiro de los maestros, frente a la política restrictiva y acumulativa de presupuestos desplegada por la actual administración estatal.
El SNTE tamaulipeco hace años confió los fondos del Sistema de Ahorro para el Retiro de los Trabajadores de la Educación al entonces UPYSSET, hoy IPYSSET, como una financiera pública que le reportaba réditos, sin riesgo, pero en manos del gobierno panista, del que no se sabe que ha hecho hasta ahora con el presupuesto que se le ha confiado, las suspicacias abundan… y no es cosa menor lo que está en juego.
Hoy los funcionarios estatales hacen acopio de ingenio para encontrar las fórmulas que les permitan cumplir con la indicación superior de despedir al 20 por ciento de la plantilla, con la peregrina idea de que eso les permitirá a los jefes atesorar más caudales.
Ya sabe, hasta el acoso sexual fue validado en ello, pasando por la reducción de salarios y compensaciones, la cancelación de permisos, la concentración de trabajadores en el Polyforum sin tareas asignadas, los uniformes “a chaleco” sin dotárseles en suficiencia, entra otras.
La novedad en la torre gubernamental, que concentra a la mayoría de las dependencias, es que en lugar de cuatro horas distintas de acceso, en algunas dependencias ya se redujo a dos, bajo la advertencia de que quien no ingrese a su oficina antes de la hora marcada -se canceló la tolerancia de 15 minutos-, se les descontará el día.
Parece algo ordinario y no lo es, porque con los horarios diferenciados, ya se daban largas filas para acceder a los elevadores y estas, se multiplicarán por dos, con el añadido que por lo menos, uno de los elevadores regularmente no funciona, pero pueden ser más.
Alcaldes y funcionarios de los tres niveles de gobierno recién firmaron el convenio para la instrumentación del programa estatal de la calidad del aire.
Al respecto, en Matamoros se ha ponderado el trabajo coordinado con organizaciones de la sociedad civil, universidades e instituciones públicas bajo la premisa, instrumentada por el alcalde CHUCHÍN DE LA GARZA, de tener especial cuidado con el entorno.
